Montero no dimitirá por su ley que excarcela violadores: «Hay que dar la cara en momentos difíciles»

La ministra de Igualdad descarta dimitir por la polémica suscitada tras la entrada en vigor de su ley del sólo sí es sí que está permitiendo que agresores sexuales y pederastas reduzcan su condena e incluso sean excarcelados. Irene Montero dice entender cuál es su «responsabilidad política» y que «cuando hay momentos difíciles» tienen «la obligación de dar la cara y demostrar» que son «más».

La ministra podemita no asume ninguna responsabilidad sobre el fracaso de su ley y la alarma social que ha desatado. Apela al «feminismo» y la «violencia política» para justificarse y agarrarse a la silla: «Tenemos la responsabilidad colectiva de demostrar que no hay violencia política que sea capaz de frenar la fuerza colectiva del movimiento feminista para garantizar todos los derechos para todas las mujeres», ha dicho.

Montero ha confesado que en ningún momento ha pensado en irse y ha centrado sus ataques a Vox por la intervención que tuvo la diputada Carla Toscano en el Congreso cuando dijo que el «único mérito» que tenía la ministra «era haber estudiado en profundidad a Pablo Iglesias».

«Vivo con mucha preocupación la violencia política como estrategia desplegada por la derecha y la extrema derecha. No va a parar. El vaso ha rebosado. Antes se habían echado en el vaso muchas gotas, no es un insulto puntual, sino una estrategia continuada y no van a parar porque lo que quieren es frenar los avances feministas», ha defendido Montero en una entrevista en TVE.

Asimismo, ha advertido de que «la violencia política es una estrategia continuada por la cual, durante muchos días seguidos, meses, años, se lleva a cabo una estrategia de destrucción personal de la persona y cuando esa estrategia se sostiene desde muchos altavoces y durante mucho tiempo se consigue el objetivo». Ha lamentado, además, la respuesta la PP a los insultos de Vox, al afirmar que «quien siembra vientos recoge tempestades».

Respecto a si se sintió respaldada por el Gobierno ante la polémica generada por la entrada en vigor de ley del sólo sí es sí y la rebaja de penas a delincuentes sexuales, ha indicado que ese apoyo «ha sido público y notorio», pero ha precisado que «lo más importante cuando se habla de violencia política es que se pueda traducir en una confianza y determinación política fuerte».